martes, 23 de marzo de 2010

Cuando pierdes la ilusión


Hace tiempo que cuando te miro a los ojos, tus pupilas me devuelven una espesa amargura en donde antes estaban el par de ojos más profundos en los que me ví reflejada jamás. Quizás perdiste la ilusión por el camino, o igual es que te la robaron. Vivir sin ilusión es casi peor que subir una larga escalera sabiendo que no hay nadie al final esperándote. Vivir sin ilusión es dejarte arrastrar por el vaivén incesante de la gente en las calles y llegar a tu casa abrir la puerta y que estén las luces apagadas.

De nada vale el esfuerzo de estar a una hora en un restaurante si has reservado mesa y el cámarero te dice: -¿Esperará a su acompañante? -No, comeré solo. ¿Es que sólo yo sé ver la tristeza que transmites? Tampoco me dejas que cruze el muro de tu pecho e intente hacerte feliz. Ni me permites que te coja fuerte la mano cuando llegues a tu casa y te sientas solo. Estás demasiado ocupado en tu vida de luces y carreras como para permitirme dedicarte unos segundos de mi tiempo. Quiero verte con ilusión. Que nunca más la pierdas detrás de las barras de los bares.

domingo, 21 de marzo de 2010

Traslúcido

Me despierto sudando por las mañanas. Me pongo de pié como cada día sin saber muy bien el porqué, por inercia. Y comienzo a hacer todo metódicamente, sin preocuparme demasiado en pensar por qué las hago de esta manera y no de otra. Cuando me descuido un poco me acuerdo de tí, y me da una sacudida el estómago. Intento templarme y continúo con lo que estaba haciendo. ¿Cómo poder explicar algo a alguien que nunca está? que nunca estará y que nunca estuvo de todas maneras. Intentar olvidarte de algo es recordarlo con más fuerza aún. Intentar poner buena cara cuando te preguntan que si te encuentras bien es una putada.

 Recorro el camino que hago todo los días persiguiendo sombras que me siguen evocando a tí en cada paso que doy. Encima parece que cuando más solo estás es cuando más gente tienes a tu alrededor que pasa y no te ve.  Eres traslúcido para el mundo, la luz te traspasa igual que traspasa al agua. A veces eres más o menos feliz por algunos momentos y de pronto vuelves a descuidarte y otro golpe en el estómago.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Podríamos vivir siendo música

Podríamos vivir para siempre si nos pudiéramos fundir en una canción. Pasarían los años y las generaciones venideras nos regalarían sus oidos, y reviviríamos en cada nota. Por siempre. 
Podríamos ser incluso melodía, incluso acorde, juntos haríamos estrofas, las más bellas. Y por siempre estaríamos en la memoria de la gente. Pero solo tengo esta vida para vivirla contigo, deja que la llene de tí. De música....

miércoles, 3 de marzo de 2010

Sigo perdiendo trenes

Por mucho que intento meterme dentro de tu cabeza, no lo consigo. Siempre acabo persiguiéndote desde cuarenta kilómetros de distancia. Hablo sin parar porque el silencio es lo más aterrador que existe en este planeta. Que si no somos dos, ni tampoco somos uno, me quedo completamente fuera de juego.

Y yo que llegué a pensar que eras tan distinto a los demás, menos normal, más especial... Y me doy cuenta de que todo fue una casualidad, que nos puso en el mismo sitio a la misma hora y se entretuvo jugando un poco con los dos a su antojo.

Y que cuando ríes, me dan ganas de gritarte todo lo que estoy pensando, pero nunca me atrevo, y donde había un comienzo ahora tal vez pondrá ¿fin? Dedico mi tiempo a esparcir versos por papeles mojados en este cuarto a oscuras. Mientras que tú te dedicas a decidir cuando no y cuando sí.

Y de todas maneras volvería a esperarte hasta que saliera el sol. Tengo tanta falta de chispa en mi vida que me agarro con fuerza a cada guiño que me ofrece, pero solo espero uno, solo uno, y ese nunca llega.

Sé perfectamente que nunca cogeré el tren correcto, y que todos los demás los perderé, como hago siempre. Pero tu estación está tan lejana...que ni intentándola la veo de lejos.