
Aguanta el tirón, intenta comprenderme. No soy la princesita que te esperas. Lo que toco lo destruyo. Siento todo lo que te digo, pero no lo siento de corazón. No soporto que camines más rápido por la calle anhelando el momento de llegar a casa para preguntarme cuanto de feliz estoy. Estoy rota, no te puedo dar lo que no tengo. No pudo prometerte algo que por mucho que busque no encuentro. No quiero que sueñes conmigo, no soportaría causarte infelicidad.
No quiero que me quieras, ¡No puedes quererme!, soy una parcela de tierra alquilada, puedes meterte en mi cama, pero no soy tuya.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarFelicidades Ana, hacía mucho tiempo que no leía algo que me llegara tanto.
ResponderEliminarUna frase tuya me ha recordado a una que escribí hace mucho tiempo que me define bastante bien:
"si no lo rompo, no es mío"
Un beso, esperando nuevas actualizaciones!